¿Mujer sucia e impura?
Las disposiciones legales y normativas del judaísmo en relación con la menstruación femenina son notablemente estrictas. Según las prescripciones del Antiguo Testamento, una mujer en estado de menstruación es considerada "impura", y esta impureza se percibe como un estado que puede "contaminar" tanto a otras personas como a los objetos con los que entre en contacto.